Receta en familia: pizza casera

Receta en familia: pizza casera

Leer, contar unidades, aprender sobre medidas, descubrir alimentos frescos… Podrían ser materias a estudiar con lápiz y papel en asignaturas como matemáticas, conocimiento del medio o lengua. ¡Pero esta vez nos trasladamos directamente a nuestra cocina!

Proponemos elaborar una divertida receta en familia que gracias a la implicación de los más pequeños nos ayudará a contextualizar asignaturas que ellos mismos tratan diariamente de la mano de sus maestros, y a favorecer su aprendizaje a través de la motivación. ¿Sabías que todo aquello que despierta el interés de los niños de forma especial lo retienen con mayor precisión? Así que ayudémosles a crecer cocinando y crezcamos juntos compartiendo momentos especiales.

¡Pongámonos gorro y delantal y disfrutemos de la creatividad, las cifras y las letras entre utensilios de cocina, libros de recetas y fogones! Descubriremos cómo hacer una pizza casera en familia:

Ingredientes para la masa de la pizza 

  • -  250gr de harina
  • -  30cl de agua
  • -  5cl de aceite
  • -  1 pizca de sal
  • -  20 gr de levadura

La masa, paso a paso

  1. Diluimos la levadura en un vaso (30cl) de agua templada. Una vez quede perfectamente mezclado, introduciremos una cucharadita de harina y dejaremos reposar entre 10 y 12 minutos.
  2. Mientras, podréis preparar una superficie diáfana, a la que alcancen en altura los niños, para disponer toda la harina en forma de volcán. En el cráter del mismo animaremos a los pequeños a introducir la sal, la mezcla reservada de la levadura y el aceite.
  3. Mezclaremos con fuerza e insistencia hasta lograr una masa consistente. Que posteriormente -¡valga la redundancia!- amasaremos y extenderemos hasta que quede bien fina.
  4. Recordad incluir papel vegetal sobre la bandeja del horno, para trasladar la masa sobre la misma. Regaremos con aceite de oliva la superficie y… ¡listos para jugar con formas y colores en la siguiente fase!

Ingredientes para la pizza

  • - 2 cucharadas soperas de tomate triturado natural
  • - 1 taza de queso rallado (pudiendo siempre mezclar varios tipos)
  • - 1 puñadito de orégano
  • - 1 pizca de sal
  • - El resto: ¡al gusto!

Puede ser un buen momento para introducir verduras y alimentos que normalmente no acepten en su día a día. Es importante darles a conocer y recordarles ingredientes verdes como las espinacas o el calabacín, y acompañarlos sobre la masa con otros que les sugieran diversión o que normalmente acepten de buen gusto (como el tomate fresco, el huevo o el queso).

Ir presentándoselos desde la compra, les ayudará a comprender el origen de los mismos. E incluso si se tiene la suerte de poder disfrutar de un huerto propio o de realizar la compra en uno de ellos, todavía se puede ampliar su experiencia: explicándoles desde dónde surgen los alimentos y qué recorrido hacen hasta el resultado en el plato final.

Durante el proceso de la receta, es importante ayudarles a:

  • - Escribir en forma de lista y con lápiz y papel todos los ingredientes necesarios; podrán ir marcando posteriormente aquellos que ya hayan utilizado. Puede ser interesante ampliar el ejercicio con toda la receta: de este modo repasaremos la ortografía y el nuevo vocabulario a través de un dictado en casa.
  • - Que corten con sumo cuidado y de la mano de un adulto.
  • - Medir litros, kilogramos, y otros conceptos como “una pizca” o una cucharada.
  • - Mantener constantemente el orden y la higiene, siendo conscientes de que será un alimento que posteriormente comamos.
  • - Hacer hincapié en conceptos como frío, caliente, dulce, salado, picante o amargo; dándoles a probar ejemplos con los que se sientan a gusto.
  • - Cumplir los distintos pasos del proceso, uno detrás de otro, animándoles a disfrutar de cómo cambia de aspecto nuestro plato.
  • - Y a entender el fuego y el horno; siendo únicamente los adultos los que lo manejen al 100%.

¿Cuánto tiempo en el horno?

Una vez hayamos decidido qué ingredientes incluimos sobre la masa de la pizza (intentando combinar distintas tipologías de alimentos sanos), precalentaremos el horno a 220º durante 10 minutos. En este transcurso de tiempo, con todos los ingredientes perfectamente cortados y dispuestos sobre la mesa, ¡llenaremos nuestra obra de arte con la ayuda de los más pequeños! Como si de un lienzo en blanco se tratase.

Posteriormente, introduciremos la pizza y la mantendremos a la misma temperatura en el interior del horno y la dejaremos durante más o menos 8 minutos, esperando a que se cocinen los ingredientes que hemos dispuesto sobre la masa y se funda el queso. El mayor síntoma de que ya está lista será que los bordes comienzan a dorarse… ¿Por qué no descubrir cómo va evolucionando la receta? Podremos observar con ellos cómo el calor del horno va produciendo distintas reacciones en la pizza que después saborearemos.

Las recetas son una excelente opción para vivir experiencias en familia y ayudar a comprender a los niños distintos conceptos que trabajan en el aula. Además, a través de este tipo de actividades podrán trabajar la psicomotricidad si les pedimos ayuda con la preparación de los distintos ingredientes.

Gracias a la cocina, tenemos la oportunidad en nuestro día a día de disfrutar de un camino gastronómico que haremos de la mano de los más pequeños. Descubrir la magia que se produce entre fogones es una gran oportunidad que nos brinda la cultura de nuestro país. ¡Destapemos la inagotable fuente de creatividad!

--

Si te interesan más artículos, suscríbete a nuestro boletín mensual. > Suscribirme <

25 de julio de 2022
¿Te gustó esta entrada del blog?
0
0